Debajo de la mesa: memorias – Juan Abreu

Un niño se esconde a leer debajo de la mesa, en su hogar de un barrio pobre en la periferia de La Habana. Vive en un mundo de penurias, un mundo duro en el que es muy difícil abrirse paso, pero vive feliz gracias a la luz del amor de la familia y la tutela de una madre dulce y aguerrida. Debajo de la mesa, en los libros, el niño héroe de estas memorias tiernas y reales, encuentra una puerta por la que escapar a un universo lleno de mundos fabulosos, plagado de retos y aventuras. Esos mundos, esos libros, lo acompañarán en los campos de trabajo de las escuelas castristas, durante su adolescencia, en los años transcurridos en las unidades militares del Sevicio Militar Obligatorio cubano, en los terribles cañaverales donde es obligado a trabajar como mano de obra esclava y más tarde, fuera ya del ejército y de esos cañaverales, en un campo de trabajo al que se le condena por “conducta impropia”.

Y los libros continúan acompañándolo cuando, integrado en un grupo de jóvenes escritores encabezados por el gran novelista cubano Reinaldo Arenas, entra en conflicto con la censura y el dogmatismo estatal. Testigo privilegiado del acoso, persecución y cárcel de Arenas, estas memorias son el testimonio de una época poco conocida de la vida intelectual de los jóvenes cubanos bajo la dictadura cubana. Canto a la madre, a la infancia, la amistad y una defensa apasionada del derecho a expresarse sin miedo.

“Todo se lo debo a los libros”, declara el autor de estas apasionantes memorias, y sin duda tiene razón.